Gastronomía de Chile: De norte a sur, todos los platos que debes probar

Chile es un país del continente sudamericano que se caracteriza por tener una división territorial por regiones y cada una de ellas (en total son 16) a su vez se subdivide en provincias. Debido a esta organización geográfica, es comprensible que cada región de Chile tenga su propia impronta, incluso en lo que respecta al turismo gastronómico.

Sin embargo, aunque el territorio esté distribuido de la manera ya mencionada, cabe destacar que al momento de referirse a la gastronomía de Chile, se suele establecer una denominación regional más simple: Norte, Centro y Sur.

Historia y tradición en la cocina chilena

Cada país tiene una historia que merece ser contada, incluso en los aspectos que, aunque no tienen que ver con el espacio político, influyeron y dieron color en el día a día de las personas de cada época. De hecho, algunas de estas costumbres se arraigaron tanto que lograron llegar hasta la actualidad.

Uno de los hábitos que ha formado parte de la tradición de las familias chilenas y de la historia culinaria fue el mantener en secreto algunas recetas. Con el correr de los años, los sucesores han encontrado los escritos originales con los cuales se elaboraron interesantes tomos sobre la cocina chilena.

Ingredientes tradicionales en la COCINA chilena

Chile, como otras naciones hispanoamericanas, ha tenido una gran influencia de la cocina europea, pero también ha sostenido la impronta de los pueblos originarios. Algunos de ellos son sumamente consumidos en países vecinos, como las aceitunas y la vid (por lo que Chile es uno de los productores de vinos más importantes del mundo, de hecho es factible que el pisco sea la bebida chilena más conocida); el calafate, que es la fruta de un arbusto característico tanto de la Patagonia chilena como de la argentina; el choclo, conocido como maíz en otras zonas de Latinoamérica, cultivado por las culturas precolombinas; la murta o murtilla, una fruta con profundo pasado mapuche; la papa, un tubérculo que fue importado por Europa desde América y, por supuesto, la palta.

Por otro lado, se destaca en toda la extensión del territorio chileno la producción, el consumo interno y la exportación de abundantes pescados y frutos de mar.

La palta chilena

La palta, llamada aguacate en sitios como México, merece un punto y aparte. Primeramente, porque la palta chilena es ampliamente reconocida en el mundo por su calidad. De hecho, al igual que ocurre con la industria vitivinícola, Chile es uno de los mayores exportadores de palta del planeta. Se la distingue por su cáscara oscura y fina, abundante pulpa, tamaño mediano, textura cremosa y excelente sabor.

Gastronomía del norte de Chile

El norte de Chile ha recibido las influencias de los pueblos originarios andinos, especialmente de las culturas aimará y aquellas características del desierto de Atacama. Por su proximidad con Bolivia y Perú, los elementos empleados más frecuentemente en la cocina (lo que también se debe a las limitaciones de cosechas debido a las condiciones de suelo y clima) fueron y son, principalmente, la papa, el maíz y un ají muy picante llamado locoto. Con respecto a las carnes, la cría de llamas y alpacas no sólo se destina al aprovechamiento de la lana, sino también a la cocina.

Algunos platos que puedes encontrar en el norte de Chile son el ajiaco (una sopa o guiso a base de carne asada y especias); humitas que, al igual que en Argentina, es una pasta de maíz, ajo y cebolla bien condimentada, envuelta y cocinada en hojas de maíz; pastaka, un guiso norteño hecho con charqui (carne seca), maíz y papas; y picante de guatitas, que no es más que un guiso a base de estómago de origen animal.

Gastronomía del centro de Chile

En los platos de la gastronomía del centro de Chile se puede reconocer la fusión cultural que hubo con España y, a su vez, las fusiones que España trajo consigo, ya que en Chile se adoptaron varias prácticas árabes. Además, es en esta zona en donde el consumo de pescados y mariscos aumenta considerablemente.

Algunos de los platos que podrás encontrar en versiones económicas y también de estilo gourmet son: El arrollado de huaso, un preparado de carne porcina calórico, bien condimentado; caldillo de congrio, una sopa de pescado y almejas; cazuela nogada, un guiso de pollo que suele acompañarse de choclo entero (maíz), papas y zapallo; chorrillana, un plato típico y antiguo que combina longanizas, carne y huevos fritos; chunchules, una comida frita más que tradicional de Chile que se compone de tripas de vaca o de cerdo rellenas con carne; las empanadas de pino, una herencia árabe que consiste en una masa blanda rellena de carne, cebollas y huevo; lisa a la teja, un pescado tierno; y pastel de jaiba (cangrejo).

A pesar de todos los platos con pescado nombrados, lo más solicitados por la población nativa y por el público turista son los pescados fritos, más que nada durante el verano.

Gastronomía del sur de Chile

En el sur de Chile la gastronomía funde lo aprendido de los españoles con la sabiduría mapuche, el pueblo originario más extendido tanto en la Patagonia chilena como en la Argentina. Estos han sabido utilizar en sus preparados los productos autóctonos de esa región.

Es así que algunos de los platos que podrás encontrar allí son el chapalele, que es una preparación de papas, manteca y chicharrones (frituras de grasa de cerdo) con huevos y harina; curanto en hoyo, que es una mezcla de carnes y papas por capas, cocidas en un hueco en la tierra, haciendo uso de piedras calientes; ensalada de digueñes, un tipo de hongo que crece en los robles (en este punto es menester recordar que son muchos los hongos que se consumen en el sur); pantruca, un caldo de carne y cubos de masa de harina; pernil de animales típicos de la región, como cordero, chivos y ternero; y porotos granados, un guiso llenador de porotos, mazamorra (maíz y leche), ajo, zapallos y cebollas.

Sopaipillas chilenas

La sopaipilla es una preparación típica de Chile que puede ser dulce o salada, según lo prefieran los comensales. Se trata de una masa a base de harina de trigo que se fríe en grasa y puede ser, una vez cocinada, espolvoreada con sal, azúcar e incluso con dulce de caña de azúcar.

Si bien se trata de un bocadillo tradicional de Chile, es posible encontrarlo en otros lugares de América Latina, tales como Uruguay, Paraguay e incluso en México. La forma que se le da al a masa suele ser redonda o rectangular, con el espesor de un centímetro, aproximadamente. Pero en Chile también se la hace con formas de bolitas, más similares a un pequeño rombo.

Además, en Chile se introducen otros ingredientes para hacer las sopaipillas. Por ejemplo, el zapallo suele ser el componente principal de las sopaipillas del centro de Chile, para luego hacerlas en sopaipillas pasadas (nombre con el que se designa a las sopaipillas saborizadas con canela y dulce de caña), sopaipillas de “hora de once” (con azúcar común o impalpable); y sopaipillas saladas con queso o mostaza.